CONTRATO DE ARBITRAJE
DEFINICIÓN
El contrato de arbitraje es un acuerdo por el cual las partes involucradas en una controversia deciden someterla a un tercero neutral para que éste la resuelva de manera definitiva y vinculante para ambas partes. Este tercero se conoce como árbitro o tribunal arbitral y su decisión se conoce como laudo arbitral.
FUNCIÓN
La función principal del contrato de arbitraje es proporcionar un mecanismo alternativo de solución de controversias a las partes involucradas, en lugar de recurrir a los tribunales judiciales. Esto permite una resolución más rápida y eficiente de la disputa, ya que el proceso arbitral es menos formal y costoso que el proceso judicial.
PARTICIPANTES
En un contrato de arbitraje participan las partes involucradas en la disputa, quienes acuerdan someterse al arbitraje. Además, participa el árbitro o tribunal arbitral seleccionado para resolver la disputa.
VALIDEZ
Para que un contrato de arbitraje sea válido, se requiere que las partes involucradas hayan acordado por escrito someterse al arbitraje. Esto significa que debe existir un acuerdo previo y explícito en el contrato o en algún documento anexo al contrato que indique que las partes han acordado resolver cualquier controversia a través del arbitraje.
Además, es importante que el contrato de arbitraje especifique el número de árbitros que resolverán la disputa, así como las reglas y procedimientos que se seguirán durante el proceso arbitral. Es común que se utilicen reglas de arbitraje establecidas por organismos internacionales, como la Cámara de Comercio Internacional (CCI) o el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), entre otros.
Es importante destacar que el laudo arbitral es una decisión final y vinculante para ambas partes, por lo que no puede ser apelada ante los tribunales judiciales, a menos que exista un acuerdo previo de las partes en ese sentido. Por lo tanto, el contrato de arbitraje debe ser redactado cuidadosamente para garantizar que las partes comprendan las implicaciones del arbitraje y que estén de acuerdo con ellas.
| Archivo | Acción |
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CONTRATO DE ARBITRAJE
DEFINICIÓN
El contrato de arbitraje es un acuerdo por el cual las partes involucradas en una controversia deciden someterla a un tercero neutral para que éste la resuelva de manera definitiva y vinculante para ambas partes. Este tercero se conoce como árbitro o tribunal arbitral y su decisión se conoce como laudo arbitral.
FUNCIÓN
La función principal del contrato de arbitraje es proporcionar un mecanismo alternativo de solución de controversias a las partes involucradas, en lugar de recurrir a los tribunales judiciales. Esto permite una resolución más rápida y eficiente de la disputa, ya que el proceso arbitral es menos formal y costoso que el proceso judicial.
PARTICIPANTES
En un contrato de arbitraje participan las partes involucradas en la disputa, quienes acuerdan someterse al arbitraje. Además, participa el árbitro o tribunal arbitral seleccionado para resolver la disputa.
VALIDEZ
Para que un contrato de arbitraje sea válido, se requiere que las partes involucradas hayan acordado por escrito someterse al arbitraje. Esto significa que debe existir un acuerdo previo y explícito en el contrato o en algún documento anexo al contrato que indique que las partes han acordado resolver cualquier controversia a través del arbitraje.
Además, es importante que el contrato de arbitraje especifique el número de árbitros que resolverán la disputa, así como las reglas y procedimientos que se seguirán durante el proceso arbitral. Es común que se utilicen reglas de arbitraje establecidas por organismos internacionales, como la Cámara de Comercio Internacional (CCI) o el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), entre otros.
Es importante destacar que el laudo arbitral es una decisión final y vinculante para ambas partes, por lo que no puede ser apelada ante los tribunales judiciales, a menos que exista un acuerdo previo de las partes en ese sentido. Por lo tanto, el contrato de arbitraje debe ser redactado cuidadosamente para garantizar que las partes comprendan las implicaciones del arbitraje y que estén de acuerdo con ellas.